—¿Qué pasó, mi niño, por qué ya no chateas con tu nueva amiguita?
—¡Es que está hasta Nepal: no puedo ayudarle desde acá!
—A ver, hijo, sé que no puedes estar a su lado apoyándola, pero con las nuevas tecnologías ya puedes compartir su mirada, lograr un cambio en su vida a través de palabras de apoyo a la distancia. ¡Tú no sabes lo importante que puede llegar a ser su amistad en un mañana! Y es probable que hoy, tú puedas ser una luz en medio de la oscuridad que ella está viviendo, ¿no crees?